Buen consejo médico
Una mujer va al médico con los ojos morados, el labio reventado y aun
sangrando.
- ¿Qué le sucedió, señora? -pregunta el doctor.
- Es que, cuando mi esposo llega a casa borracho siempre me golpea.
- No se preocupe, hay una solución para eso: cómprese muchos caramelos
de leche, de esos chiclosos y un momento antes que el borracho de su
marido entre a la casa métase cinco caramelos en la boca y comience
a masticarlos lenta, pero muy lentamente, hasta que él se duerma.
Un mes después la mujer regresa al consultorio:
- Doctor, su recomendación resultó muy efectiva, cada vez que mi
esposo ha llegado borracho me he comido los caramelos, los he
masticado lenta, muy lentamente, y nunca más me ha vuelto a golpear.
- ¡Que bueno señora! ¿Vio la conveniencia de mantener la boca cerrada?
(anónimo)