Capricho de náufrago
Se hunde una embarcación, y un hombre agarrado a un tronco se salva.
Flotando, a lo lejos, mira una negra cabellera en el mar y la atrae
hacia él. El naufrago descubre que es una mujer viva, la toma del
cuello y juntos llegan a una isla desierta. Al llegar a la isla
descubre que se trata de Salma Hayek. Por salvarla y estar en una
isla desierta, ella se entrega con pasión total.
Pasa un año sin que los rescaten y ella empieza a notar que él cada
día está más triste, por lo que le cuestiona la razón de su tristeza.
El tipo no contestaba, hasta que un día, de tanto insistir la mujer,
el hombre la lleva al baúl de ropa que rescataron del naufragio y le
dice:
- Te voy a pedir que te vistas con este pantalón, esta camisa y
sombrero de hombre; además, que te pongas este bigote postizo.
A Salma esto le pareció un tanto extraño, pero como se trataba de la
felicidad del hombre que le salvó la vida, aceptó.
Para darle un toque final, el hombre le pinta una espesa barba a la
Hayek. Después la invita a caminar por la playa; Salma, más extrañada
aún, no sabe ni qué hacer, en eso, el hombre rompe el silencio y dice:
- ¡Oye, compadre, a que ni te imaginas a quién me estoy cogiendo!
(anónimo)