La cervecita del recién casado
El viernes siguiente después de regresar de la Luna de Miel:
- Mi vida ahorita vengo.
- ¿A dónde vas cariño?
- Al bar mi cielito, a tomarme una cervecita....
La mujer se lleva la mano a la cintura y le dice:
- ¿Quiere cervecita mi amorcito?
Y en eso, abre la puerta del refrigerador y le enseña veinticinco
marcas de cervezas de doce paises diferentes: mexicanas,
alemanas,holandesas, japonesas, etc.
El marido no sabe que hacer y se le ocurre decirle:
- Hay mi pichurri... pero en el bar... tu sabes... la jarra helada...
No terminaba de decir esto cuando la esposa interrumpe:
- ¿Quiere jarra congelada mi chiquito...?
Saca del congelador una jarra helada, congelada, blanca... tan blanca
que hasta temblaba de frío. El marido apenado dice:
- Si churri mía, pero en el bar sirven unas botanas riquísimas vuelvo
en un momento, ¿sí?
- ¿Quiere botanitas mi amor...?
Abre el horno y el refrigerador y saca quince platos diferentes de
botanas: aceitunas, totopitos, patatas bravas, cacahuates, palomitas,
quesos, pate, caviar, carnes frías, etc.
- Pero caramelito... en el bar... tú sabes... las maldiciones, las
palabrotas y todo aquello...
- ¿Quiere palabrotas mi amorcito...? Entonces... ¡TE TOMAS LA PINCHE
CERVEZA EN LA PUTA JARRA Y TE TRAGAS LAS PINCHES BOTANAS, PERO DE
AQUÍ NO SALES, HIJO DE LA CHINGADA! ¡¿ENTENDISTE PENDEJO?!
(anónimo)