Contribuyentes al éxito
Tres empresarios de éxito que estaban conversando. Le preguntan a uno:
- ¿Quién contribuyó más a tu éxito: tu esposa o tu amante?
- Mi esposa, desde luego -responde el exitoso ejecutivo-. Sus consejos
me han ayudado siempre.
Dice el segundo:
- Yo atribuyo mi buena fortuna a mi amante. Ella ha sido mi
inspiración para buscar metas más altas.
Le preguntan al tercero:
- Y tú ¿a quién atribuyes tu triunfo en el mundo de los negocios?, ¿a
tu esposa o a tu amante?
- A las dos por igual.
- ¿Cómo es eso?
- Sí. Mi esposa creía siempre que yo estaba con mi amante. Mi amante
siempre creía que estaba con mi esposa. Y mientras yo podía estar en
mi oficina dándole duro a la chamba.
(anónimo)