Cuestión de honor
Una chica y su novio se adelantaron y ella quedó embarazada. El
muchacho le cumplió la palabra dada, y se casaron. Transcurrieron
treinta años de esto, y la pareja fue a pasar una segunda luna de miel
en una casa de playa, esta vez en compañía de amigos y familiares.
La primera noche él se metió en la cama y de inmediato apagó la luz
para dormir. Ella empezó a gritar a voz en cuello, con tono de pasión
erótica que se oyó en toda la casa:
- ¡Papacito! ¡Eres un tigre! ¡Eres el mejor amante del mundo! ¡Me
estás volviendo loca de placer! ¡Me estás matando! ¡A tu edad, y
todavía eres insaciable!
- ¿Qué te pasa?
Responde la señora en voz baja:
- Hace treinta años tú salvaste mi honor. Ahora yo estoy salvando el
tuyo.
(anónimo)