Foto gallega
Un gallego iba por la calle y se encuentra un espejito de cartera, lo
levanta, se mira en él y dice:
- ¡Coño! ¡A este tío lo conozco!
Y se lo guarda en el bolsillo del pantalón.
De regreso a su casa vuelve a mirarse al espejo y repite:
- ¡Joder! ¡Que a este tío lo conozco!
Al entrar a su casa guarda el espejo en el bolsillo de su pantalón y
se sienta a la mesa del comedor. Mientras su mujer le sirve la comida,
el gallego vuelve a mirarse en el espejo y repite:
- ¡Ostia! ¡Que yo a este tío lo conozco!
Cuando la mujer se da cuenta, le pregunta:
- Oye, Manolo ¿qué tienes en la mano?
- Nada importante, mujer.
Y se guarda el espejo en el bolsillo del pantalón.
Terminada la cena el gallego se va a dormir dejando el pantalón sobre
una silla. La mujer, intrigada, una vez dormido su esposo se acerca a
la silla, saca el espejo del pantalón, se mira al mismo y dice:
- ¡Ya lo sabía! ¡Es una foto de mujer! ¡Y qué cara de puta que tiene!
(anónimo)