Hijo del caníbal
Iba un hombre caminando por la selva, cuando de pronto lo rodea un
grupo de salvajes caníbales, y se veía que no tenían muy buenas
intenciones.
- ¡Ya me llevó la chingada! - dijo el hombre.
En eso, el cielo se abrió, apareció un rayo de luz y se escuchó una
voz profunda que le dijo:
- No, todavía no, lo que debes hacer es quitarle la lanza al jefe
caníbal y clavársela a su hijo en el corazón.
Entonces, el hombre pelea con el jefe, le quita su lanza y se la clava
en el pecho al pequeño que estaba junto a él, ante el asombro de todos
los caníbales.
El hombre voltea al cielo, y se vuelve a escuchar la voz:
- ¡Ahora sí, ya te llevo la chingada!
(anónimo)