Igual de calientes
Una pareja que cumplían sus bodas de oro estaban sentados en la mesa
para desayunar cuando el marido le dice a su mujer:
- Fíjate, cariño, llevamos casados cincuenta años.
- Si, hace cincuenta años estabamos en esta misma mesa desayunando
juntos.
- Lo sé, -dijo el viejecillo- hace cincuenta años, seguramente
estabamos aquí sentados, desnudos como una pareja de jóvenes
jilgueros.
- Bueno, qué hacemos, cielo, ¿nos desnudamos?
La pareja de viejecitos se desnudan y se sientan a la mesa.
- Sabes, cariño, -la viejecita le dice casi sin aliento- mis pezones
están igual de calientes hoy por ti que hace cincuenta años...
- No me sorprende, -le contesta el viejecito- uno lo tienes en el café
y el otro está dentro del chocolate con churros...
(anónimo)