Ilusión infantil
Pepito cumplió 10 años de edad, y su papá pensó que había llegado ya
el momento de revelarle los misterios del sexo.
Así pues lo llamó aparte y le habló solemnemente:
- Quiero decirte algo acerca de aquello que te conté una vez, lo de
las abejitas y los pajaritos.
- ¡No! -rompió a llorar el niño-. !Por favor no me lo digas!.
- ¿Por qué? -se sorprendió el papá-.
Explica entre lagrimas Pepito:
- Cuando cumplí cinco años me confesaste que no había ratón de los
dientes. Cuando cumplí seis me revelaste que no era cierto lo del
conejo de Pascua. Al llegar a los siete supe por ti que Santa Clos
era mentira. Si ahora me dices que no existe el sexo, me vas a
quitar la única razón que tengo para seguir viviendo.
(anónimo)