Inocente
Llega una señorita a la iglesia a confesarse y le dice al cura:
- Padre, he cometido un pecado.
- A ver hija... ¿cuál es el pecado que has cometido?
- Bueno padre, usted sabe, padre, que yo estaba con mi novio, veníamos
de una fiesta en su Volkswagen sedán y yo, inocente, padre. A mitad
de camino él me ofreció unas cervezas, yo no tomo, pero acepté. Y
yo, inocente, padre. Después de unas cuantas cervezas él se metió
por un supuesto atajo, y yo, inocente, padre, y en medio de un
callejón, de repente me tomó en sus brazos, y yo, inocente, padre, y
empezó a besarme por todo el cuerpo, y yo, inocente, padre. De
pronto, me puso las piernas en las correítas de las puertas y me
hizo suya dos veces seguidas, y hasta ese momento fui inocente,
padre.
El padre interrumpe:
- ¿Inocente tú? ¡No me jodas! El inocente soy yo, que hace 25 años
tengo un Volkswagen y recién ahora me entero para que sirven esas
correítas.
(anónimo)