Llegar al quinto
Va un viejito a la consulta del médico y le dice:
- Mire, doctor, tengo una novia jovencita y me quiero casar. Pero yo,
cuando voy por el primero, voy bien; cuando voy por el segundo,
empiezo a fatigarme. En el tercero me dan calambres y escalofrios, y
en el cuarto me desplomo.
Y le pregunta el doctor asombrado:
- ¿Pero usted qué edad tiene?
- Pues 87 años.
- ¿Y a su edad qué más quiere?
- Pues llegar al quinto piso, que es donde vive ella.
(anónimo)