Marido imperdonable
La esposa le dice con rencoroso acento a su abnegado cónyuge:
- Jamás podré perdonarte lo que me hiciste anoche, Fulano.
- ¿Qué tehice, mujer? -inquiere con angustia el lacerado sin saber a
qué se refería su fiera consorte.
- Soñé que tú y Brad Pitt se peleaban por mí, y tú ganabas.
(anónimo)