Milanesas de ayer
Llega la suegra a la casa del yerno y le dice:
- Querido, ¿no le molesta que me
quede a comer con usted?
- No, para nada. A usted, linda suegrita, ¿no le molesta comer milanesas de
ayer?
- No... a mi no.
- Bueno. Entonces, ¿por qué no se deja de joder y viene mañana?
(anónimo)