La mujer del soldado
Un soldado norteamericano destacado en la embajada de su país en
Inglaterra tuvo unos días de vacaciones y se encontró en Las Vegas con
su esposa. Después de una noche de amor frenético dormían los dos
cuando un ebrio que se equivocó de puerta dio en ella grandes golpes.
- ¡Tu marido! -exclama asustado el militar, medio dormido-.
- No seas tonto -lo tranquiliza ella, también adormilada-. Está en
Inglaterra.
(anónimo)