OLFATO, ANIMAL
Juan y María, dos jóvenes campesinos, paseaban por el campo:
- Oye Juan, ¿cómo sabe el potro cuando la yegua quiere?
- Por el olor pues, María.
Siguen caminando y a poco andar:
- Juan, ¿y cómo sabe el perro cuando la perra quiere?
- Ya te dije, María, por el olor.
Más adelante, María vuelve a preguntar:
- ¿Cómo sabe el toro cuando la vaca quiere?
- Ya pu's María, te lo he dicho: ¡por el olor!
- Oye Juan, ¿tú eres maricón o estás resfriado?
(anónimo)