Todo el equipo
Una mañana, el marido vuelve a su cabaña después de varias horas de
pesca y decide dormir una siesta.
Aunque no conoce bien el lago, la mujer decide salir en la lancha. Se
mete lago adentro, ancla y lee un libro.
Tras un rato, se acerca un guardia en su lancha, se aproxima a la
mujer y le dice:
- Buen día, señora. ¿Qué está haciendo?
- Leyendo un libro.
- Está en zona restringida para pescar.
- Disculpe, oficial, pero no estoy pescando, estoy leyendo.
- Sí, pero tiene todo el equipo. Por lo que veo, podría empezar en
cualquier momento, tendré que llevarla y detenerla.
- Si hace eso, le tendré que acusar de abuso sexual.
- ¡¡¡Pero ni siquiera la toqué!!!
- Es cierto, pero tiene todo el equipo ¿o no? Y por lo que veo, podría
empezar en cualquier momento.
- Disculpe, que tenga un buen día, señora.
(anónimo)