EL WIWICHU
Una hermosa noche de diciembre una pareja de novios están muy
acaramelados mirando el mar. De repente, le dice él a ella:
- Chica, ¡déjame tocarte el wiwichu!
- Estás loco, mi negro, ¿cómo crees?
- Anda chica que no ves que es el tiempo perfecto, ¡déjame tocarte el
wiwichu!
- ¡No!, ¡no te lo permitiré!
- Anda chica, es ahora o nunca, deja que te toque el wiwichu.
- Bueno, mi negro, sólo porque te quiero mucho...
Entonces el negro agarra su guitarra y prosigue:
- ¡Wiwichu a merri crismas, wiwichu a merri crismas, wiwichu a merri
crismas, and a japi niu yir!
(anónimo)