Zapatos gallegos
Venancio fue el martes a la zapatería. Después de probarse unos
cuantos pares, eligió unos italianos, muy elegantes. Al entregárselos,
el empleado le advirtió:
- Señor, este tipo de zapato suele apretar mucho en los primeros cinco
días.
- No hay problema, no los voy a usar hasta el próximo domingo.
(anónimo)